lunes, 13 de junio de 2016

Carta a Decio de Maria sobre el grito ¡Eh puto!



México D.F., a 4 de abril de 2016

Sr. D. Decio de Maria Serrano
Federación Mexicana de Fútbol Asociación A.C.
Colima 373, colonia Roma,
06700, México D.F.


Estimado Presidente de la FEMEXFUT:

 Con más de 50 años de ser aficionado al fútbol, y por razón de la responsabilidad ante todo nacional, pero también universal que nos atañe en el caso; le remito la presente consideración en relación al ya famoso grito que ha provocado, la para mí, indignante reacción de la FIFA. Haga usted uso la misma a su entera conveniencia.

Esta reacción, centrada en la existencia de los homosexuales tiene dos aspectos enteramente diferentes a saber: 1.- Los que padecen esta condición en sí mismos; y 2.- Los que culpablemente desean ver tal desgracia −independientemente de que sean ellos mismos o no homosexuales− no solamente difundida con engaños, sino generalizada, y aún impuesta con multas a los recalcitrantes.

La hipocresía implícita queda en evidencia por el ridículo argumento de la discriminación que conlleva equiparar un vicio (la homosexualidad) con una condición por su naturaleza irreformable (ser negro); para luego rematar con el supuesto derecho de parejas homosexuales a adoptar niños; esta sí, discriminación salvaje contra criaturas indefensas condenadas a una convivencia depravada.
En resumen: Comparar una situación natural, y por consiguiente penalmente inimputable como ser negro, con lo que tradicionalmente ha sido considerado una conducta típica penal, un delito; y esto, bajo el término “discriminación”; como si los delincuentes encarcelados no los tuviéramos por ese solo hecho discriminados en grado extremo. Dado lo cual, tratando el tema de las comparaciones ofensivas, diga usted, señor Presidente de la FEMEXFUT: ¿Qué le han hecho los negros para que no proteste usted en su defensa por la sola comparación?

Como hombres, nos reconocemos tentados a aprovecharnos de las mujeres; pero hay una enorme diferencia entre ser tentados a seducir, y/o violar a una mujer, y cometer el delito; tanto como la hay entre haber nacido hombres y haber nacido delincuentes. Pero en el caso de los homosexuales se pretende que esa diferencia entre lo más humano y lo más bestial es inexistente y debe, en su formalidad jurídica y moral desaparecer −no en beneficio de los sujetos a la esclavitud de ese vicio, sino por el contrario, de manera favorable a perpetuar su esclavitud al mismo a pesar de las tremendas implicaciones personales y sociales que conlleva. Recordemos, por tanto, para comenzar, que el pecado en cuanto pecado; al igual que el delito en cuanto delito, lo es: PRIMERO: Por razón del daño, lo que impide que un delito pueda despenalizarse cuando el daño subsiste. SEGUNDO: Que se delinque como se peca, tanto por acción como por omisión, lo que precisa nuestra obligación en el caso. Obligación personal, y colectiva institucional. Obligación FEMEXFUT, y nacional si queremos merecer ante las naciones.

Y que, en todo, al igual que en el fútbol la mejor defensa es el ataque. Para anotar como para no recibir goles, no permita usted, Decio de Maria Serrano, que el balón que le robó la FIFA permanezca un instante más cerca de nuestra ya multada portería. Llévelo usted como mexicano al campo contrario. Reclute a cuantos sea necesario, pero obtenga la victoria recordando que solo la verdad nos hará libres.

Para formar sobre la cancha tenemos argumentos invencibles y la banca más nutrida e irreprochable. Podemos comenzar por el Levítico:

Como centro delantero: Si alguien se acuesta con varón, como se hace con mujer, ambos han cometido abominación: morirán sin remedio; su sangre caerá sobre ellos. (Levítico 20:13)

Esta condena de muerte es tan incontestable que proviene de la Sabiduría Divina; y por tanto solo nos queda precisar su causa, y esta es, en relación a la verdad como el valor fundamental a la civilización, que ni es posible encarnar la mentira en grado mayor; ni es posible llevar la mentira a la práctica en forma más agresiva y ofensiva; ni es posible devastar a una nación de manera más definitiva que por medio de este vicio fundado en la mentira. Cuando un ser humano se engaña a sí mismo sobre lo más íntimo de su naturaleza, para que otro pueda engañarse a sí mismo de manera similar, ha creado una asociación cuyo objetivo es la negación de la verdad en sí misma; y los efectos son tan mortíferos que si Sodoma y Gomorra hubieran sobrevivido no estaríamos aquí. Estaríamos tan extintos como los dinosaurios. En su caso personal, si vamos 10 generaciones atrás tiene, 2 elevado a la décima potencia, 1024 ancestros; y con uno o una que hubiera sido homosexual no habría nacido Decio de Maria. Califique usted ahora las pretensiones de la FIFA.
Considere los beneficios para la FIFA de llevar estos hechos preclaros, e irrefutables ante la FIFA para beneficio de la misma y del fútbol. Admírese del beneficio que puede usted aportar como patriota a la afición con verdades tan bien fundadas.

Para completar no solo el equipo, sino también la banca, le ofrezco el resumen siguiente:

"No te acostarás con varón como con mujer; es abominación. . . .Yo, Yahveh, vuestro Dios. (Levítico 18:22-30)

Si alguien se acuesta con varón, como se hace con mujer, ambos han cometido abominación: morirán sin remedio; su sangre caerá sobre ellos. (Levítico 20:13)

La mujer no llevará ropa de hombre ni el hombre se pondrá vestidos de mujer, porque el que hace esto es una abominación para Yahveh tu Dios. (Deuteronomio 22:5)

No llevarás a la casa de Yahveh tu Dios don de prostituta ni salario de perro (homosexual), sea cual fuere el voto que hayas hecho: porque ambos son abominación para Yahveh tu Dios. (Deuteronomio 23:19)

Vuélvete al Altísimo y apártate de la injusticia, odia con toda el alma la abominación. (Eclesiástico 17:26)

Entonces Yahveh hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego de parte de Yahveh. Y arrasó aquellas ciudades, y toda la redonda con todos los habitantes de las ciudades y la vegetación del suelo. (Génesis 19:24-25)

«No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. (Mateo 5:17)

Por eso Dios los entregó a las apetencias de su corazón hasta una impureza tal que deshonraron entre sí sus cuerpos; a ellos que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, y adoraron y sirvieron a la criatura en vez del Creador, que es bendito por los siglos. Amén. Por eso los entregó Dios a pasiones infames; pues sus mujeres invirtieron las relaciones naturales por otras contra la naturaleza; igualmente los hombres, abandonando el uso natural de la mujer, se abrasaron en deseos los unos por los otros, cometiendo la infamia de hombre con hombre, recibiendo en sí mismos el pago merecido de su extravío. Y como no tuvieron a bien guardar el verdadero conocimiento de Dios, entrególos Dios a su mente insensata, para que hicieran lo que no conviene: llenos de toda injusticia, perversidad, codicia, maldad, henchidos de envidia, de homicidio, de contienda, de engaño, de malignidad, chismosos, detractores, enemigos de Dios, ultrajadores, altaneros, fanfarrones, ingeniosos para el mal, rebeldes a sus padres, insensatos, desleales, desamorados, despiadados, los cuales, aunque conocedores del veredicto de Dios que declara dignos de muerte a los que tales cosas practican, no solamente las practican, sino que aprueban a los que las cometen. (Romanos 1:24-32)

Pues si Dios no perdonó a los Ángeles que pecaron, sino que, precipitándolos en los abismos tenebrosos del Tártaro, los entregó para ser custodiados hasta el Juicio; si no perdonó al antiguo mundo, aunque preservó a Noé, heraldo de la justicia, y a otros siete, cuando hizo venir el diluvio sobre un mundo de impíos; si condenó a la destrucción las ciudades de Sodoma y Gomorra, reduciéndolas a cenizas, poniéndolas como ejemplo para los que en el futuro vivirían impíamente; y si libró a Lot, el justo, oprimido por la conducta licenciosa de aquellos hombres disolutos- pues este justo, que vivía en medio de ellos, torturaba día tras día su alma justa por las obras inicuas que veía y oía - es porque el Señor sabe librar de las pruebas a los piadosos y guardar a los impíos para castigarles en el día del Juicio, sobre todo a los que andan tras la carne con apetencias impuras y desprecian al Señorío. (II Pedro 2:1-10)

Me dijo también: «Hecho está: yo soy el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin; al que tenga sed, yo le daré del manantial del agua de la vida gratis. Esta será la herencia del vencedor: yo seré Dios para él, y él será hijo para mi. Pero los cobardes, los incrédulos, los abominables (homosexuales), los asesinos, los impuros, los hechiceros, los idólatras y todos los embusteros tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre: que es la muerte segunda. (Apocalipsis 21:6-8)

Que el injusto siga cometiendo injusticias y el manchado siga manchándose; que el justo siga practicando la justicia y el santo siga santificándose. Mira, vengo pronto y traigo mi recompensa conmigo para pagar a cada uno según su trabajo. Yo soy el Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y el Fin. Dichosos los que laven sus vestiduras, así podrán disponer del árbol de la Vida y entrarán por las puertas en la Ciudad. ¡Fuera los perros (homosexuales), los hechiceros, los impuros, los asesinos, los idólatras, y todo el que ame y practique la mentira!» (Apocalipsis 22:11-15)

No os engañéis; de Dios nadie se burla. Pues lo que uno siembre, eso cosechará: (Gálatas 6:7)

Doce citas bíblicas. Doce referencias al libro milenario. Doce, al texto más influyente de todos los tiempos.


El delito de genocidio

Tómese un momento para meditar con sus abogados el contenido de la publicación siguiente: https://www.icrc.org/spa/resources/documents/misc/treaty-1948-conv-genocide-5tdm6h.htm

Este delito lo encontrará plasmado en el Art. 149-Bis de nuestro Código Penal Federal. En la violación de nuestras leyes ya lo metió la FIFA, e incurrir en condena por omisión no ha sido, ni será, su intención. ¡El asunto reviste la máxima gravedad!

Con gusto lo invito a comer para ver esto más a fondo. ¿Le parece bien mañana martes?

Su amigo 



Luis de Guerrero Osio y Rivas

Decio de Maria, a pesar de mi insistencia telefónica, no se dignó ni tomar la bocina.

















1 comentario:

Ludgor dijo...

NO FUERON NI SEIS NI OCHO, FUERON SIETE GOLES A CERO

Tres días después a la presentación y ratificación de esta denuncia, dado que el mismo Dios, Jesucristo, estaba siendo despreciado en Su Palabra fija en la Sagrada Biblia, se dio el asombroso 0-7 contra la Selección de Fútbol de Chile. De esta manera, era el mismo Dios Quien ratificaba esta denuncia con un hecho que, no admite otra explicación, ni puede tenerla dada la secuencia de acontecimientos que la incluyen , y que tiene asombrados a todos. Lo precisa el número 7 que identifica al Padre: Siete días de la Creación; la Minorá o candelabro de los siete brazos; los Siete Espíritus siempre presentes ante el Trono de Dios; las siete virtudes, y los siete pecados capitales etc. Medítese, por tanto, en el contexto de la plena verdad jurídica y teológica.
¡QUIÉN COMO DIOS!